¿Es Colombia un falso positivo?
Este proyecto, de largo aliento, tuvo su fase inaugural en el marco del Paro Nacional de noviembre de 2019, y su objetivo es plantear reflexión sobre la historia y realidad de Colombia en la imagen del FALSO POSITIVO (un tema de difícil tratamiento incluso para los mismos colombianos) con el propósito de visibilizar y denunciar, desde la experiencia individual y colectiva, la situación de violencia de nuestro país.
Inicialmente cuenta con el registro de la acción performativa ejecutada durante la marcha del 21, y el cacerolazo del 22 de Noviembre. El paro es un llamado a la indignación, pues no sólo da testimonio del panorama de desigualdad que reina en Colombia, sino de la oleada de asesinatos sobre las comunidades indígenas, líderes sociales y de derechos humanos, campesinos, afrodescendientes, sindicalistas y desmovilizados del conflicto armado; también civiles, estudiantes y menores de edad han sufrido las consecuencias. En adición, durante la semana transcurrida del paro, aunados al terrorismo institucional y la profunda división de opiniones alentada por los desquiciados discursos mediáticos, se han presentado casos documentados de uso desmedido de la fuerza por parte de las autoridades policiales y el ESMAD contra personas que ejercían su derecho a la protesta.
Si esperamos a ser legitimados por las personas o las instituciones para ser oídos, ¿cuándo será eso?
El performance es de carácter colectivo y participativo, y se ejecuta con tres elementos básicos: Espejos, la persona que los sostiene, el testimonio (escrito, hablado). Se trata de un retrato vivo y múltiple, donde el sujeto reflejado es testigo del otro a través de la experiencia compartida. El referente inicial de este proyecto es la narración "la historia de las palabras (Radio Insurgente), y se enmarca primero dentro del contexto de nuestras historias personales como mujeres y la historia violenta de Colombia, lo que da título al trabajo.
'El término de "falso positivo" tiene que ver con el asesinato de personas inocentes que son presentadas por el ejército colombiano como guerrilleros muertos en combate. Normalmente, un positivo, en la jerga militar, se refiere a bajas del enemigo o a éxitos militares.'
Por la memoria de las madres de Soacha, y el joven Dylan Cruz, golpeado el sábado en la cabeza por una bomba aturdidora lanzada por el Escuadrón Antidisturbios (Esmad) de la policía, quien murió el día 25 de noviembre.
"Tus muertos vivirán; junto con mi cuerpo muerto resucitarán. ¡Despertad y cantad, moradores del polvo! porque tu rocío es cual rocío de hortalizas; y la tierra echará los muertos".
Isaías 26:19